El porqué del subdesarrollo del Perú

(Gestión, 2 de diciembre de 1999)

En los últimos meses, han surgido algunas voces que sostienen que la apertura comercial y financiera por la que el Perú se ha encaminado desde agosto de 1990 no ha rendido frutos en términos de crecimiento económico y, sobre todo, reducción de la pobreza. Por ello, no son pocos los que proponen medidas redistributivas y populistas. Es más, el mismo gobierno parece no estar convencido de los beneficios del liberalismo económico, por lo que ya ha anunciado una serie de medidas claramente intervencionistas con el fin de mejorar la situación de las empresas y de los trabajadores.

Esto es lamentable porque, remitiéndonos a la historia del Perú de los últimos cien años, casi todos los Presidentes que nos gobernaron buscaron reducir la pobreza precisamente a través de políticas intervencionistas y populistas, sin lograr beneficio alguno. Muchas de estas políticas se enmarcaron dentro de lo que conocemos como mercantilismo, y consistieron en el otorgamiento de derechos monopólicos y oligopólicos u otro tipo de favores adeterminados grupos privilegiados, generalmente cercanos a los gobernantesde turno. La sobreprotección de empresas, la exoneración de impuestos, elotorgamiento de subsidios, los controles de precios, entre otras medidas, fueron disfrazadas como beneficiosas para el conjunto de la población. Sin embargo, con el paso del tiempo, estas políticas no sólo no solucionaron el problema de la desigualdad del ingreso, sino que lo agravaron al desincentivar la inversión privada, el intercambio comercial y el crecimiento económico.

Las consecuencias negativas del populismo y de la inestabilidad de nuestras políticas son evidentes. Por un lado, nunca existieron los incentivos necesarios para invertir en proyectos de mediano y largo alcance. Los proyectosde más larga duración se ciñeron a los campos en los que las tasas de rentabilidad esperadas eran considerables, pues el riesgo fue siempre elevado en un país tan poco estable como el nuestro. Fue por ello que las inversiones más comunes se produjeron en las actividades extractivas, caracterizadas por altos retornos en el corto plazo y, por ende, por una rápida recuperación del capital invertido. Por otro lado, los grupos privilegiados nunca se vieron en laobligación de desarrollar mecanismos eficientes de producción, porque se encontraban protegidos contra la competencia nacional y extranjera. Todosestos hechos devinieron en mercados ineficientes, con empresas acostumbradas a la protección y no a la competencia, con inversiones casi exclusivamente en las actividades extractivas, con el consiguiente progreso de algunos sectores privilegiados y la postergación de las grandes mayorías.

En consecuencia, la población debe comprender que las políticasredistributivas y populistas sólo hunden al país en el atraso y la pobreza. Esindudable que una economía abierta está sujeta a shocks externos, por lo que existirán períodos recesivos con mayores tasas de desempleo. Sin embargo, también debemos reconocer que como consecuencia de la apertura comercial y financiera y de la reducción del papel del Estado en la economía, las sociedades llegan a tener en el largo plazo más beneficios que pérdidas. Sólo con reglas dejuego claras, estables y favorables a la inversión privada, podremos estar seguros de que en los próximos años el crecimiento económico se traducirá en reducción de la pobreza.

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